La principal presa del diablo somos nosotros. Como el diablo no puede tocar a Dios, busca tocar al ser humano, que es la imagen y semejanza de Dios.
“Cuando mis enemigos retroceden, tropiezan y perecen delante de ti.” Salmos 9:3
El abrigo del Todopoderoso exige de nuestra parte un comportamiento que esté de acuerdo con la voluntad de Dios. No es solo orar y pedir la transformación de nuestra familia, sino ser un ejemplo a seguir.
“¡Qué hermosos son sobre los montes los pies del que trae buenas nuevas, del que anuncia la paz, del que trae las buenas nuevas de gozo, del que anuncia la salvación, y dice a Sión: Tu Dios reina!” Isaías 52:7
Dios quiere que seamos portadores de buenas noticias y no de malas noticias.
No nos preocupamos por nuestro pasado, porque Dios ya nos perdonó; no le tememos al presente, porque estamos al abrigo del Altísimo, y tampoco al futuro, porque nuestros pies están en la montaña, que representa el Altar.
Hay personas que tienen una vida horrible, pero sus pies son lindos, porque tienen su vida en el Altar.
La pregunta es: ¿sus pies están plantados en la montaña?
Cuéntenos, ¿qué fue lo que Dios habló con usted?
De aquí en adelante, todo será diferente.
#IglesiaUniversal
#TemploDeLosMilagros
#DeAquíEnAdelanteTodoSeráDiferente