Día 12°: Alma Próspera
El error de mucha gente es priorizar a personas o a cosas, por pensar que prosperidad es sinónimo de más dinero, mucho dinero, bienes y fama.
El error de mucha gente es priorizar a personas o a cosas, por pensar que prosperidad es sinónimo de más dinero, mucho dinero, bienes y fama.
¿Cuántas personas se quejan de que, en el momento de la desventura, del sufrimiento, Dios «no las miró», y dejó que sucediera aquel mal?
¿Cuántos malos ejemplos, problemas, decepciones podrían haber sido evitados si hubiera de nuestra parte temor, consideración a Dios?
Que uno llame Padre a Dios y no tenga Su Espíritu Santo —el ADN de los hijos de Dios.
¿Hemos valorado y santificado el Nombre De Dios —Jesús—, no volviendo a la iniquidad o a las iniquidades de antes?
Cuando el Señor habita en uno ya no hay más espacio para la soberbia, para la duda, para la malicia, para la acomodación.
No hay injusticia en Dios, por lo contrario, en Sus Verdades hay Misericordia, porque Dios Es Paciente, Amable.
Enfóquese en esta Primera Semana del Ayuno de Daniel…
Siendo Guiados por Dios, sabemos qué camino o caminos evitar y qué camino seguir, y así ser realizados, felices, Salvos.