18 Diciembre
La oración bendice, pero el sacrificio trae éxito.
Como seres humanos, nuestro grande desafío es tomar decisiones, sin tener como base las emociones.
Es cuando mostramos, en lugar de decir, que ganamos el respeto y admiración de nuestra familia.
Cada uno de nosotros podemos hacer lo dificilísimo, pero, lo imposible, solamente Dios puede hacer.
La muerte puede venir tan rápido como el abrir y cerrar de ojos, ¡así también vendrá el Señor Jesus! Esté listo para ambos.
No espere que las cosas acontezcan, exija el máximo de si mismo, tornándose el agente de su propio milagro.