¡Desde el Templo de los Milagros, para toda la República Argentina, Vigilia Abba Padre!
Fuimos creados a la imagen y semejanza de Dios, no para que nuestras necesidades físicas sean satisfechas, sino para ser nacidos de Dios a través del Bautismo con el Espíritu Santo y poder llamarlo «Abba, Padre».
Una es la gloria del sol, otra la gloria de la luna, y otra la gloria de las estrellas, pues una estrella es diferente de otra en gloria. Así también es la resurrección de los muertos. Se siembra en corrupción, resucitará en incorrupción. 1 Corintios 15:41-42
Quienes reciben y creen en Jesús y santifican Su Nombre con su carácter, son los que se vuelven hijos de Dios.
Serán salvos quienes siembren su cuerpo natural, es decir, su voluntad, porque así como nacemos con este cuerpo, debemos nacer del celestial.
Cuando se recibe la imagen celestial, el Espíritu Santo nos convierte en miembros de Su Familia.
Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: ¡Abba, Padre! Gálatas 4:6
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Obispo Júlio Freitas
Nos vemos en la IURD o en las Nubes!
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