Una tarde de fe en el Templo de los Milagros, con centenas de obreros, colaboradores y CPO de Buenos Aires, Argentina.
“Dichoso aquel siervo a quien, cuando su señor venga, lo encuentre haciendo así. De cierto os digo que lo pondrá sobre todos sus bienes. Pero si aquel siervo es malo, y dice en su corazón: “Mi señor tardará”; y empieza a golpear a sus consiervos, y come y bebe con los que se emborrachan, vendrá el señor de aquel siervo el día que no lo espera, y a una hora que no sabe, y lo azotará severamente y le asignará un lugar con los hipócritas; allí será el llanto y el crujir de dientes. Mateo 24:46-51”
La obra de Dios está dividida en tres grupos de personas:
1.° Los que no cumplen con su deber: Son ciegos ante lo que se les orienta, y esperan que otros hagan lo que ellos tienen que hacer.
2.° Los que son conformistas: Hacen lo que se les pide y solo lo hacen para cumplir.
3.° Los dispuestos: Los que siempre se preguntan cómo servir más, y buscan cuidar de cada alma.
Nadie está obligado a servir a Dios. Cuando la persona es bautizada en el Espíritu Santo, no impone su manera de pensar o sus gustos, sino que se somete y está dispuesto a cumplir lo que le orientan.
¿Qué fue lo que Dios habló con usted durante esta reunión?
De aquí en adelante, todo será diferente
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