Entienda por qué Dios lo escogió
La persona que el Eterno elige para Sus propósitos no es la más preparada intelectual o físicamente, sino la que tiene esta trinidad: fe, sinceridad y disposición para obedecerlo, además de confiar en Él y servirlo.
«… sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en Su presencia.» 1 Corintios 1:27-29
Aunque el siervo se sienta incapaz, despreciado, joven e inexperto para la misión, en él debe haber fidelidad, humildad, valentía y temor al Señor.
El que realmente fue elegido por Dios para un propósito Divino no tiene dudas y nunca retrocederá ante las dificultades. Su llamado es tan íntimo y fuerte que se vuelve irrecusable.
La verdad es que antes de que fuéramos formados en el vientre de nuestra madre ya había en la mente de nuestro maravilloso y magnífico Altísimo Dios el propósito sublime de usarnos para servirlo y honrarlo en la evangelización de la humanidad.
Como estos escogidos cumplen Su voluntad, le duela a quien le duela, son estos los que se vuelven un ejemplo para las demás personas, tanto en el universo de los que creen como en el de los que no creen.
Las Escrituras muestran ejemplos de hombres y mujeres que fueron especialmente capacitados para eso: Josué, Rut, Jefté, Sansón, Ana, Samuel, Ester, Juan el Bautista, el obispo Macedo y nosotros, obreros de la Universal.
Hombres y mujeres que, desde el útero materno, los planes Divinos ya eran reales para que predicaran a Su pueblo y a las naciones.
Durante sus vidas, no les hablaban solo a los judíos, sino a los egipcios, moabitas, filisteos, amonitas, caldeos, brasileños, norteamericanos, europeos, africanos, asiáticos, entre otros. Por Su perfecta voluntad, el Altísimo tiene buenos pensamientos y planes para todos.
El Señor desea que cada uno se deje usar, que su vida sea para honrarlo, porque este es el mayor propósito de la existencia humana: servir al Creador. Sin embargo, el Eterno respeta la necedad de los que juzgan sus voluntades personales mejores que las de Él.
En estos últimos días, tuvimos el privilegio de haber visitado África, luego de 27 años, España, luego de 14 años, y Portugal, luego de 7 años, y debo decir que: El soldado de Jesucristo no se conoce por sus habilidades, persuasiones, capacidades o formaciones, sino por su lealtad al Rey y a la ejecución de la misión que le confiaron.
Durante nuestro viaje misionero, pudimos realizar reuniones con más de 10 mil personas que nunca estuvieron en la Universal, y que tuvieron una experiencia con el poder de Dios, Sus enseñanzas y con la presencia del Espíritu Santo.
Además, casi 14 mil personas apartadas volvieron a practicar la fe inteligente, porque reconocieron que sin Jesús nada son.
Por otro lado, de los 2.156 miembros que se entregaron incondicionalmente, luego de meses y años de búsqueda, recibieron el bautismo con el Espíritu Santo (sello).
El fruto de estos días de trabajo en tres países fue más de 44 mil personas unidas en esta misma fe, ¡con la convicción de que de ahora en más todo será diferente!
Ciertamente, si todo esto no fuera EXCLUSIVAMENTE para la gloria de Dios, todo sería en vano.
⌛️ ¡Nos vemos en la IURD o en las nube❗️
Obispo Júlio Freitas