22 de marzo
La Palabra de Dios es la única fuente de luz capaz de iluminar correctamente nuestros pensamientos.
La Palabra de Dios es la única fuente de luz capaz de iluminar correctamente nuestros pensamientos.
¿Cuántas personas se quejan de que, en el momento de la desventura, del sufrimiento, Dios «no las miró», y dejó que sucediera aquel mal?
¿Cuántos malos ejemplos, problemas, decepciones podrían haber sido evitados si hubiera de nuestra parte temor, consideración a Dios?
Dios pide que seamos misericordiosos con las personas ingratas, así como Él lo es con nosotros.
Que uno llame Padre a Dios y no tenga Su Espíritu Santo —el ADN de los hijos de Dios.
¿Hemos valorado y santificado el Nombre De Dios —Jesús—, no volviendo a la iniquidad o a las iniquidades de antes?
Cuando el Señor habita en uno ya no hay más espacio para la soberbia, para la duda, para la malicia, para la acomodación.
No hay injusticia en Dios, por lo contrario, en Sus Verdades hay Misericordia, porque Dios Es Paciente, Amable.