Blog Eventos

6.º Domingo del Abrigo del Altísimo

5 de noviembre 2023

Aunque caigan mil a tu lado y diez mil a tu diestra, a ti no se acercará”. Salmo 91:7

En otras palabras, incluso abrigado en Dios, incluso con su vida entregada a Dios en el Altar, incluso confiando en Dios, van a ocurrir problemas, accidentes, catástrofes. Van a pasar situaciones desagradables, aun en la propia iglesia va a haber personas que nos decepcionen, personas que un día predicaron, nos enseñaron —obreros, pastores, obispos que nos recibieron y fueron ejemplo de fidelidad, de humildad, de fe, de sacrificio, de devoción— pero en determinado momento de su vida cayeron en la fe porque dejaron de ser justos, dejaron de practicar lo que está escrito.

El justo es justificado por la fe, por la obra de la obediencia,

“la fe por sí misma, si no tiene obras, está muerta” (Santiago 2:17).

Es mientras yo vivo lo que está escrito. No basta con que sepa, no basta con que predique, tengo que practicar y, una vez practicando, caerán mil a mi lado y diez mil a mi diestra y —como está escrito— a mí no se acercarán. Es decir, esta plaga, esta maldición, esta situación, este mal ejemplo, esta decepción, esta catástrofe, este ataque terrorista, esta inflación, esta corrupción, esta promiscuidad, esta mentira, esta ingratitud, no me van a corromper, no me van a tocar.

Lo voy a ver, voy a sentir el dolor de enterrar a un familiar que muere, o si sufrimos un accidente, o si alguien a nuestro alrededor, sea a la izquierda o a la derecha, se cae o es víctima de algo espiritual, o pierde todo materialmente hablando. Pero hemos tenido ejemplos de personas que, durante la pandemia, perdieron todo lo material, pero no perdieron la fe, ¿y qué hizo Dios? Restauró al doble como lo hizo con Job, todo para gloria y honra de Dios y vergüenza y humillación de satanás y sus demonios, y de los que, incluso estando en la iglesia, los criticaron. Dios es Maravilloso, Sublime, Altísimo y Glorioso ¡y Él hizo justicia con los que guardaron la fe!

“Con tus ojos mirarás y verás la paga de los impíos”. Salmo 91:8

Vamos a mirar, pero no para burlarnos de la desgracia del que cayó a nuestra izquierda o a nuestra derecha, no es para eso, sino para que veamos la paga de los impíos. Es decir, los impíos tienen su paga. ¿Cuál es la paga del impío? Los problemas de la vida, sea la pérdida de un familiar, sea la pérdida de un bien, sea una catástrofe, un ataque terrorista o una guerra.

Nosotros tenemos pastores y familiares en medio de la guerra, pero Dios los está guardando, ellos están viendo la paga de los impíos y la protección de los que hacen del Señor su Abrigo.

No es castigo de Dios, no confunda las cosas, no estamos hablando de castigo sino de elección, yo elijo hacer de Dios mi Abrigo entregándome a Él totalmente en Su Altar y viviendo por la fe. El justo es justificado por la fe. Fe con obras, fe con obediencia, con sacrificio, con renuncia, con entrega, como la que Jesús hizo por nosotros. Él Se sacrificó y espera lo mismo de nosotros, por eso participamos en la Santa Cena con frecuencia como Él ordenó, para recordar lo que Él hizo por nosotros.

Aunque caigan mil a tu lado y diez mil a tu diestra…”

A la izquierda los impíos y los incrédulos, los que eligen confiar en su capacidad, en sus recursos, en sus propios sueños, en sus vanidades. ¿Y a la derecha? A la derecha los religiosos, los fanáticos, los hipócritas.

¿Y nosotros? Nosotros seguimos por el Camino, que es Jesús, Él dijo

“Yo Soy el Camino y la Verdad y la Vida…” (Juan 14:6).

Manténgase en el Camino, en el Altar, enfocado en Jesús como Autor y Consumador de su fe. Usted no será decepcionado. Va a sufrir embates, pérdidas, accidentes, situaciones desagradables adentro y afuera de la iglesia, pero esto no será razón para que se postre, se rinda, caiga o niegue la fe. Guarde eso.

¿Qué fue lo que aprendió durante esta reunión? Escriba su comentario.

De aquí en adelante, todo será diferente

#IglesiaUniversal
#TemploDeLosMilagros

TAMBIÉN LEA:
– Abrigo del Altísimo
– 2º Domingo del Abrigo del Altísimo
– 3º Domingo del Abrigo del Altísimo
– 4º Domingo del Abrigo del Altísimo
– 5º Domingo del Abrigo del Altísimo